ups, cai en otro círculo

Cai en círculo de mudez, vida sencilla medio animal sin palabras metida en mi cucha yo adentro de mí adentro de mi casa en mi edificio, yo yo yo. Que in-so-por-tableeeeee. Pero con Coquito con quien nos vamos a recorrer las plazas y las veredas de este porteño lugar con historias, por ejemplo hoy una señora con su perro ovejero alemán, era como una georgina barbarrosa pero más fina, hizo todo un standup sobre los cuentos con su perro y el resto de la gente, me recordó que la plaza giordano bruno no estaba enjaulada, era el punto de encuentro de familias con perros, que ya vamos al zoológico hasta para ver el pasto, que Buenos Aires hace unos años era una de las ciudades capitales más arboladas del mundo, que no aprendemos a ponernos en los zapatos del otro y le hacemos a los demás cosas que no les gustan a ellos, que tenemos miedo y mal humor y que un tipo de un edificio que ella estaba construyendo le dijo que aceitara (da!) a quien sea pero que les corten la rama del árbol que le ensuciaba de hojas el balcón. Y que no podemos pedirle a los políticos que sean diferentes de lo que somos, me dijo que tenemos que conectarnos más con el resto de los animales y las plantas, ministro, me contó todo lo de los perros alfa y de la manada. Que en vez de resoluciones de más rejas, se vea como necesario dejar de separar. Rejas y paredes que nos separan de los pobres o los perros. (Los gatos se cuelan y no respetan las leyes). Hacer más plazas. En el parque rivadavia está prohibido jugar al futbol, andar en bicicleta y subirse a los árboles.
Todo esto me lo dijo con tanta gracia, yo ahora no estoy muy graciosa que digamos, pero la pasé muy bien con esta señora.
También conocimos al Julio El Viejo, que es un señor que cuida coches mientras charla con todos y fuma y convida porro al que le pida y coquito lo amó desde que lo vio. Es como una especie de gurú de chicas y chicos adolescentes de una escuela que queda ahí cerca y lo llaman para que vaya a fumar con ellos. Es un tipo de ley que tiene códigos y muy sabio.
Y a un chico con el que tenemos una especie de amor platónico que nunca será real
Ultimamente Coqueiro es mi Demon, como en esa película en la que las almas están afuera de uno en forma de animal. Limpié la casa de Violetta!! (mi vecina de los collares) toda una aventura, encima con Mariel, en vez de barrer tierra, era tierra, fotos antiguas, recortes de diarios culturales, postales, bolas de collar de diversos colores, monedas de otros países, alimento para gatos, pedazos de diarios italianos, sobres de cartas. La casa de una diva argentina. Y nos convidó con helado y café y muchas historias a lo milagros lópez. Viajó por Francia, Italia, Rusia, África. Ahora se va a vivir por un tiempo a Paris a cuidar a una amiga de su madre que está mal de salud. Desde hace tres días no queremos vernos y nos mandamos cartas que dejamos en las macetas. Me abrió su corazón y sus pensamientos, me emociona esa mujer.